general1. En la proyección hacia posibilidades ya se ha anticipado la comprensión del ser. En el proyecto, el ser está comprendido2, no ontológicamente concebido. El ente con el modo de ser del proyecto esencial del estar‐en‐el‐mundo tiene como constitutivo de su ser la comprensión del ser. Lo que antes fue afirmado dogmáticamente1 queda ahora mostrado a partir de la constitución del ser en el que el Dasein es su Ahí, es decir, en el comprender. Una aclaración satisfactoria del sentido existencial de esta comprensión del ser, que corresponda a los límites de toda la presente investigación, sólo podrá lograrse sobre la base de la interpretación temporaria del ser.

Disposición afectiva y comprender caracterizan como existenciales la (148) aperturidad originaria del estar‐en‐el‐mundo. En el modo del temple anímico, el Dasein “ve” posibilidades desde las cuales él es. En la apertura proyectante de estas posibilidades él ya está siempre anímicamente templado. El proyecto del poderser más propio está entregado al factum de la condición de arrojado en el Ahí. ¿No se torna más enigmático el ser del Dasein con la explicación de la estructura existencial del ser del Ahí en el sentido del proyecto arrojado? Efectivamente. Es necesario que dejemos salir primero a luz toda la enigmaticidad de este ser, aunque sólo sea para fracasar de un modo genuino en la “solución” y poder así plantear de nuevo la pregunta por el ser del estar‐en‐el‐mundo arrojado y proyectante. Para poder poner, por lo pronto, ante la mirada en forma fenoménicamente suficiente el modo cotidiano de ser del comprender afectivamente dispuesto, es decir, de la plena aperturidad del Ahí, se requiere una elaboración concreta de estos existenciales.



§ 32. Comprender e interpretación

El Dasein en cuanto comprender proyecta su ser hacia posibilidades. Este comprensor estar vuelto hacia posibilidades, por la repercusión que tienen sobre el Dasein esas mismas posibilidades en tanto que abiertas, es también un poder‐ser. El proyectarse del comprender tiene su propia posibilidad de desarrollo. A este desarrollo del comprender lo llamamos interpretación [Auslegung]cxxxii. En la interpretación el comprender se apropia comprensoramente de lo comprendido por él. En la interpretación el comprender no se convierte en otra cosa, sino que llega a ser él mismo. La interpretación se funda existencialmente en el comprender, y no es éste el que llega a ser por medio de aquéllacxxxiii. La interpretación no consiste en tomar



1 ¿Cómo ‘está’ allí esa aperturidad y qué significa ahí Ser [Seyn]?

2 Lo que no significa que e] ser ‘sea’ gracias al proyecto.

1 Cf. § 4.


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Martin Heidegger (GA 2) Ser y Tiempo (Jorge Eduardo Rivera C)